Creo que este es el momento perfecto para que hable de lo que pienso al respecto:
El ser humano, las personas, somos lo que somos por
puro azar. El surgimiento de nuestra especie es producto de la casualidad en la historia de la evolución de las especies. Realmente, tenemos una única ventaja con respecto al resto de especies animales que pueblan la Tierra:
la capacidad intelectual. Puede considerarse esta característica una herramienta más en la lucha por la supervivencia. El problema surge cuando tendemos a considerar al ser humano una especie superior por el hecho de ser una especie con un alto desarrollo de la capacidad cognitiva. Yo no sé si el ser humano es superior o inferior al resto de animales. ¿Somos superiores por el hecho de que podemos cuestionarnos el porqué de las cosas? ¿Porque somos capaces de reflexionar sobre nuestra propia existencia? No lo sé, no lo tengo claro. Una persona, en condiciones naturales, es decir, desnuda y sin ningún tipo de herramienta artificial (ropa, cuchillo, mochila, etc), no duraría ni 24 horas en la selva del Amazonas. Tampoco duraría mucho en un desierto, o en un manglar. Con esto quiero decir que,
biológicamente, somos muy débiles. Casi cualquier animal puede acabar con nosotros en la vida salvaje (de hecho, nuestros predecesores, primero fueron presa, y no cazadores).
El hombre debe elegir su camino. Considero que cuando uno se muere, se muere y ya está. Pienso que no somos nada. Solo vidas que aparecen y se pierden para siempre. No somos especiales. Somos materia orgánica en descomposición. Ahora bien, tenemos un intervalo de tiempo en el que existe algo mágico, algo que sí es especial. La vida, tal y como la sentimos individualmente, es especial. Me siento afortunado por estar vivo y por poder tocar la batería. Nosotros, como individuos, no valemos nada (me refiero a nivel práctico, con capacidad de influir realmente en el megacosmos). Aunque nuestra especie consiguiera cargarse la Vía Láctea a través de una superguerra nuclear, esta galaxia no es NADA en comparación con todo lo que hay más allá.
¿A dónde pretendo llegar con esto? A eso voy...
De cualquier modo, existe en consenso implícito universal de hacer de la vida algo bello y algo que merezca la pena. Creo que con esto cualquier persona estará de acuerdo conmigo. Pretendemos demostrar que somos algo más que el producto salvaje de la evolución. Tenemos códigos éticos y morales que pretendemos universalizar desde nuestra individualidad. ESTE PUNTO SEGURO QUE LE CHOCA A ALGUIEN, PERO DÉJAME EXPLICARME. La filósofa Adela Cortina explica muy bien lo que vengo diciendo. Cito un párrafo de un texto que escribí hace tiempo sobre el texto (no encuentro el texto en sí...)
[...] Ya expresé mi acuerdo con Adela Cortina y lo ratifico aquí. Entendemos que es básico aceptar la Declaración Universal de los Derechos Humanos, como consecuencia de que es totalmente razonable pensar que ningún individuo querría que lo que ahí se dice no se cumpliera para él. Así pues, ¿qué opinión merece un sistema moral que no respeta y guarda para todas las personas los derechos que previamente hemos establecido como universales? Ya hemos dicho que no es posible argumentar que no todos somos de la misma especie y que, por tanto, existen individuos que no merezcan tales derechos. Esto no tiene ningún tipo de fundamento, mientras que sí lo tiene el hecho de que blancos, negros o judíos constituimos una misma especie.
Abogar por la tolerancia de un sistema moral que no afectara mi propia vida en ningún sentido, pero que atentara contra mis principios morales, es la insensatez de la que habla Ernesto Garzón. En primer lugar, como ratificaba Adela Cortina, porque la moral tiene pretensiones de universalidad, y, en segundo, porque hacerlo lleva al individuo relativista a una contradicción.[...]
Punto y aparte. Retomo mis divagaciones.
Como estoy hablando de cosas difíciles que no controlo completamente y blablabla y para no extenderme mucho más, concluyo. Pienso que, con todo lo anterior que he defendido, el ser humano debe de elegir su camino. Tenemos una herramienta poderosa. ¿Qué hacemos con ella? Desde mi punto de vista, el maltrato animal, el toreo, no está bien. No concuerda con los mínimos morales. La moral y la ética son las herramientas que nos permiten analizar nuestro comportamiento. ¿Debemos actuar de modo que nuestro comportamiento individual concuerde con un máximo universal, como dedía Nietzche (mas o menos)? Es lo lógico. Matar a un animal haciéndolo sufrir no es algo positivo. Un hecho cultural no tiene por que ser posiivo. Al final todo se reduce en hacer de la vida algo útil y bello. De cualquier modo, no debemos olvidar que formamos parte de la naturaleza. Comemos animales, comemos plantas. Nos comemos a los conejos y en oriente se comen a los perros.
Con respecto a lo que decía un forero de la eperimentación con animales, tema tan criticado por los defensores de los mismos, tengo que decir que es cuestión de supervivencia. El hombre busca sobrevivir. Para ello emplea las herramientas de las que le ha dotado la naturaleza. ¿Quiere prevenir enfermedades? Me parece bien que se emplee animales como fuente de experimentación. Es cuestión de supervivencia. Ahora bien, este tema no es comparable al de los toros, que busca la diversión y entretenimiento a través del sufrimiento REAL de otro ser vivo. Eso, éticamente, no está bien.
Yo que sé, sé lo que quiero decir, pero hoy no tengo la cabeza fina. En fin, dejo esto así. Al menos me ha servido para pensar un poco
Probablemente no entendáis mucho de lo que he querido decir. En fin, lo siento. Ahí lo dejo.