Bueno, el caso es que pese a quien pese, 4´33 está considerada tanto una obra de música contemporánea como una obra de arte contemporánea, con lo cual puede que no sea algo tan trivial como muchos pensarán; tampoco es una parida que se le ocurrió a Cage en un momento dado para hacer la gracia.
Esta gente tiene un concepto mucho más amplio sobre lo que es música o lo que no. Al final lo que pasa es que nosotros rápidamente clasificamos como "no musical", "poco musical" o "de musicalidad dudosa" aquello que se sale de nuestros esquemas.
De todas formas esto es normal, no es nuevo y viene pasando desde que existe la música. Y si no leed las críticas que recibió Beethoven en su última época, y no voy a entrar ya en cosas más obvias y más cercanas como el rock, el punk, el metal, y un largo etcétera...
Todos estos movimientos musicales han tenido un proceso lógico y se han originado por una situación histórica y social determinada. Y siempre ha habido gente que se ha apresurado a no considerarlo música. Y siempre la habrá, por cierto...
También creo que cada uno debe escoger la definición de música con la que él esté de acuerdo, pero mucho cuidado cuando vayamos a generalizar con estas cosas, porque este tema da para mucho, y hay mucho hablado y escrito, y precisamente las opiniones que ningunean estas manifestaciones son las que menos criterios utilizan.
Edito, que me faltaba la última página por leer!!!
Primero, Juanjo f.c., que no te engañen, la música no necesita melodía, armonía y ritmo, a no ser que estés hablando con algún eminente músico del siglo XIX o anterior. El único factor primordial que podríamos buscar para la música es es el del tiempo, y el más relacionado con este es el ritmo, así que podemos considerarnos una de las partes más importantes de la música
En segundo lugar, el mundo del arte es enorme, pero desde el siglo XX y con la llegada de los avances tecnológicos su estética y su pensamiento cambia radicalmente. Hoy en día la técnica no se considera un valor artístico por sí misma. En este sentido, hoy en día no tiene mucho sentido la imitación fiel a la naturaleza a la hora de pintar un cuadro o hacer una escultura. La razón es simple: hay máquinas que lo van a hacer mil veces mejor que cualquier humano. De todas formas, sí existe la corriente del hiperrealismo, cuya justificación es precisamente esa (que el cuadro parezca una foto). Sin embargo, llegados a este punto, lo que adquiere especial importancia es lo que el artista QUIERE representar, y el valor de su obra está en la manera en que lo consigue. Pintar un bodegón o un paisaje puede estar muy bien, y nadie va a negar que es arte, pero su valor artístico actual es prácticamente nulo. El arte se debe a su tiempo, y es por eso que la gente que está a la vanguardia de la creación no se interesa por esos temas.
Tenemos un problema, y es que intentamos evaluar todo con criterios que ya no son actuales: en la pintura solemos utilizar juicios de valor que surgieron en otro periodo histórico, y que desde luego se quedan cortos al explicar lo que ocurre hoy en día. Y por eso mucha gente anda tan perdida.
En la música, igualmente, nos manejamos con líneas de pensamiento que muchas veces se llevan siglos de diferencia con lo que intentan explicar: me refiero precisamente a la gente que exige los tres componentes mágicos: melodía, ritmo, armonía... con la de cosas más que tiene la música: timbre, frecuencias, dinámica, textura, colores, pasión, intención, pensamiento... La armonía es un invento tonal, para la música tonal. No nos podemos quedar ahí, porque estamos perdiéndonos muchas otras cosas...