Serie BYZANCE
Una de las principales sorpresas del NAMM 2001 celebrado el pasado verano ha sido, sin duda alguna, la nueva gama de platos Meinl Byzance.
Hasta ese momento, Meinl fabricaba todos sus platos a partir de discos estampados con remaches de metal. En cambio, la nueva gama se fabrica a partir de diferentes aleaciones de metales. Ésta consta de un ochenta por ciento de cobre a lo que se le suma un veinte por ciento de estaño y eso es algo que difiere de la mezcla estándar o, lo que es lo mismo, un noventa y dos por ciento de cobre y un ocho por ciento de estaño.
Los Byzance se fabrican en la misma Turquía y el proceso de fabricación es totalmente artesanal. Finalmente, el proceso de acabados concluye en Alemania.
Los platos se ubican en dos métodos de fabricación: por un lado, los artesanales y, por otro lado, los que se sirven de máquinas para su elaboración. El proceso artesanal viene representado desde hace ya algún tiempo por platos mundialmente conocidos como, por ejemplo, los Zildjian K y K Constantinopla, los Sabian HH y toda la gama de platos fabricados por Istanbul Mehmet, Istanbul Agop, Bosphaorus, Turkish y Wuhan. Por otro lado, también está el sistema híbrido entre la fabricación artesanal y la realizada por máquinas. Tal es el caso de los platos como los Avedis de Zildjian o los AA de Sabian. Los platos Byzance tendrían un pie en cada uno de estos dos sistemas. Algunos gozan de las características de los típicos modelos K de Zildjian y ninguno de ellos tienen el brillo tan característico de los Avedis o los AA Zildjian y Sabian, respectivamente. A pesar de tales referencias a tales modelos, los platos Meinl Byzance tienen un sonido propio y sobradamente definido.
RIDES
Los rides Byzance constan de seis modelos diferentes y todos en 20" como única medida a excepción del Projection ride de 22". Los citados modelos de 20" constan del Flat ride, el Medium, el Ping, el Heavy, el Light, el Dry ride. Yo clasificaría el Medium como un plato más cercano a los ligeros en cuanto a peso se refiere y, en consecuencia, el Heavy lo situaría dentro de la gama medium. Ambos tienen un buen equilibrio en cuanto a respuesta de baqueta y expansión se refiere. Además, ambos rondarían también la gama Medium con respecto a los tonos. Por su parte, el modelo Heavy proporciona un tono algo más elevado.
Elegí el Medium para jazz y el Heavy para contextos algo más roqueros pero ambos podrían funcionar en los dos géneros. Por otro lado, el modelo Light tiene un tono más bajo y alguna que otro reminiscencia a los clásico K de Zildjian.
El Ping ride me recuerda a los platos que normalmente tienen el sobrenombre de Heavy. Constan del tono más alto y del sonido más metálico de todos los que constituyen esta gama de rides. De todas maneras, goza de la suficiente expansión como para diferenciarlo del típico sonido "yunque" que predomina en los platos de gama Heavy. Por su parte, el modelo Dry tiene más expansión de la que esperaba aunque tal expansión es algo estrecha, una característica que hace que este modelo goce de un sonido más ágil al ser empleado para tocar patrones más rápidos.
Siempre he sido un entusiasta de los Flats pero el modelo Byzance no sólo goza de estas características sino que, aunque parezca estúpido, sonaba realmente plano. Lo que quiero decir es que sonaba muy seco hasta el punto de que algunos podrían tacharlo de poco musical. Por otro lado, el Projection ride fue toda una sorpresa. La mayoría de los rides con esas medidas que he tenido la oportunidad de probar constan de un sonido demasiado grande. En cambio, el Projection de Byzance goza de un equilibrio en cuanto a sonido y definición se refiere. Otras características son su tono bajo y un aire típico de los apodados platos Dark. Quizás es demasiado contundente para tocar en una formación de trío pero sonaría genial para un cuarteto y todo lo que sube hasta una mismísima Big Band.
CHARLES
Tal y como sucedía con el Heavy ride, esperaba que la gama de charles Heavy de 14" sonasen demasiado metálicos. La verdad es que su sonido dista mucho de mis expectativas y sus características lo definen como un modelo con mucho cuerpo y carácter. Los Medium de 13" tienen un sonido más oscuro y algo menos penetrante pero funcionarían genial para formaciones de jazz o bandas con sonido poco contundente.
CRASHES
A pesar de que los diez modelos existentes cubren una gran franja de tonalidades, lo que más me sorprendió fue su consistencia. Suele haber mucha diferencia en función del peso y las medidas pero, en este caso concreto, todos ellos suenan como si fueran miembros de una misma familia. Con la mayoría de sus modelos oscilando entre pesos medianos y ligeros, los crashes Byzance tienen un sonido oscuro y una expansión que hace que destaque el color por encima de la fuerza. Los crashes de 14" y15" tienen mucho más cuerpo del que yo esperaba, con un decay muy rápido. Ideal para contextos poco estruendosos donde se agradece el típico tono largo pero con un volumen y una fuerza algo menores.
Tres son los crashes que Meinl presenta en 16": Thin, Medium-thin y Medium. El primero tiene un tono muy bajo para un plato de tales medidas. No obstante, los otros dos podrían servir en cualquier contexto debido a su contundente ataque y su moderado sustain.
En 17" tenemos el médium-thin y el thin, ambos con un buen equilibrio entre el tono y la fuerza del plato. Por último, el de 18" viene en formato Thin, Medium-thin y Medium. Al igual que sucedía con los de 16", el Thin tenía un sonido realmente oscuro mientras que los otros dos eran algo más versátiles. Todos sonaban muy parecidos en cuanto a timbre se refiere. No obstante, a la hora de combinarlos, la mejor opción fue tener muy en cuenta los diferentes pesos. Cuanto más pequeñas son las medidas mejor combinaciones se obtienen con respecto a los tonos. Si se optase por configuraciones de dos crashes y uno de ellos fuera el Medium-thin de 18", el de 16" o los de inferiores medidas podría cumplir la función de segundo plato.
SPLASHES
En mi opinión, el splash de 12" sonaba más a un crash pequeño. Tenía mucho más cuerpo y expansión que los usuales splashes con tales medidas. A pesar de no tener mucho volumen, sí hay que destacar su fuerza debido a su tonalidad. El de 10" sonaba mucho más a lo que yo esperaba pero el de 8" parecía prácticamente de juguete. Su altísimo tono podría servir para plato de efectos pero, si lo que se busca es un sonido de splash, es mucho más recomendable acudir al de 10".
CHINAS
La mayoría de chinas que he probado podrían catalogarse dentro de dos ámbitos: por un lado, los que constan de un sonido sucio y, por otro lado, los que se asemejan al sonido de un gong. Sin duda alguna, los Byzance estarían ubicados dentro de la segunda categoría. El sonido del de 16" es particularmente metálico y los de 18" y 20" tienen algo más de expansión, aunque su sonido sigue siendo seco y con un tono realmente bajo.
Dos sonidos en uno
Mediante la combinación de fabricación moderna y tradicional, Meinl ha creado una línea de platos con características realmente únicas. Una opción más que recomendable, sobre todo si lo que estás buscando es un sonido específico y concreto.
Reproducción de artículo aparecido en la revista Batería Total nº 32