Coño Good, que no me lees. Que ya he dicho que no doy validez categórica ni a lo uno ni lo otro. Que sí, que vale, que el hombre está mayor y no se quiere morir atao a un palo en el balcón de la plaza San Pedro con un subsecretario auxiliar cardenalício moviéndole las manos mientras él da la encíclica del día con un hilillo de voz.
Pero igual no es el único motivo...
Te voy a decir lo que yo pienso: desde el primer dia de su papado estoy seguro que ha habido quien ha estado trabajando para joderle (con más o menos resutados) y posicionarse en la parrilla de salida. A este papa y a cualquier otro que hubiese salido. Mientras ha tenido mano de hierro, todos quietos, pero desde el dia en que le dió la primera tos chunga a este hombre, empezó la carrera para sustituirle y el revuelo de sotanas que debe haber habido desde entonces, ni en el escenario del Molin Rouge, hoygan. Las organizaciones tan jerarquizadas como esta en la que hay un sólo hombre en la cúspide suelen tener una jauría (en esta caso curia) de pretenders que te cagas y una de facciones y familias que riete tú de la Cosa Nostra. Y estos estan a la que salta para abalanzarse sobre el moribundo de poder. Es por eso que no me extrañaría, repito, no me extrañaría, que aparte de su salud precaria, haya habido movimientos que le fuercen a dimitir. Yo no vivo allí, pero no sería raro.
Una hipótesis podría ser precísamente algo de lo que tú apuntas. Ha tocado lo intocable (aunque sea poquito) y seguro que habrá algunos a los que no les ha hecho pizca de gracia. Igual el hombre prefiere salir ahora por la puerta grande antes de que le saquen algún pufo que le manche los últimos años de papado. Es una hipótesis que no sería taaaaan extraña. En todas las cortes de cualquier rey feudal (que es a lo que más se asemeja el Vaticano), las puñaladas e intrigas han estado siempre a la orden del día.
Pero de algo sí que estoy convencido: en el centro del Vaticano hay un pozo oscuro y frío que ni Darth Vader podría mirar fijamente.
No tengo pruebas aquí a mano... sólo aplico el sentido común: cualquier organización que dure tantos años, con leyes propias, relacionada con el resto de poderes del Universo Mundo, y que no rinde cuentas ante nadie más que sí misma, ha de tener una de mierda debajo de las alfombras que no la hace desaparecer ni David Copperfield (el mago, no el de Dickens) en el más húmedo de sus sueños.
Es por eso que con unas alfombras tan abultadas como las del Vaticano, yo no pongo la mano en el fuego por nada de lo que venga de allí...